lunes, 7 de septiembre de 2009

Hechos históricos importantes - Primera Parte

La imprenta

Las crónicas antiguas atribuyen la invención del papel a un miembro del séquito del emperador Ts 'ai Lun en 105 a. C. Sin embargo, con el paso de los años se fueron perfeccionando las técnicas para su obtención.
A partir del siglo XIII, las ciudades italianas introdujeron un nuevo tipo de escuelas adaptadas a las necesidades comerciales, lo que llevó a la alfabetización a una importante proporción de la población.
La imprenta ocupó el centro de los movimientos intelectuales, literarios, económicos, tecnológico y políticos que se anticiparon al Renacimiento. Ya a fines del siglo XII, la tecnología había acudido en ayuda de la cultura.
El papel se había introducido en Europa por parte de los árabes a través de España e Italia.
En el centro de los experimentos de dónde surgió la técnica de imprimir con el tipo móvil surge la poderosa personalidad de Johann Gänsefleisch, más conocido como Gutenberg. Nacido en 1399, hijo de orfebre que fue maestro de la Casa de la Moneda del Arzobispo de Mainz, Gutenberg tuvo que abandonar Mainz tras una revuelta a manos de los gremios de la ciudad y estableció residencia en Estrasburgo donde, entre 1435 y 1444, se dedicó a desarrollar varios inventos, uno de los cuales era fabricante de papel.
En 1455, junto con Peter Shoeffer, el hijastro de un ex socio, abrió el primer establecimiento imprenta y en 1457 publicó el primer libro impreso que llevaba un pie de imprenta. Se imprimían almanaques, indulgencias, aunque también se imprimió la Biblia de 42 líneas. Desde el principio, la imprenta estuvo destinada a jugar un papel importante en acelerar la comunicación a varios niveles culturales.
El arte de la impresión llegó a Paris en 1470 y Lyon en 1473, al igual que en los Países Bajos, Polonia en 1474 e Inglaterra en 1476.
Los libros afirman que la participación de sus propietarios en la cultura de su tiempo y el carácter de una biblioteca puede decirnos algo del entorno intelectual que representa.
Sería erróneo pensar que hasta la aparición del periódico la prensa se dedicaba principalmente a la producción de libros. Desde sus inicios ha sido un medio de información de todo tipo. Desde el siglo XV en adelante aparecían panfletos con descripciones de victorias militares, festivales, progresos reales y funerales. De forma gradual, la imprenta empezó a utilizarse para decretos oficiales, proclamaciones y avisos. Empezaron a ser comunes las narraciones populares de apariciones monstruosas y otros sucesos apócrifos. Más tarde, la imprenta se utilizó para todo tipo de publicidad.
La demanda de noticias financieras y políticas de actualidad, de parte de un público fundamental, llevó al surgimiento de los auténticos periódicos. En 1597 Samuel Dilbaum inició una hoja informativa mensual en Augsburgo, donde estaba la sede el Banco de Fugger y, hacia 1605, salió a la luz un boletín comercial quincenal en Amberes.
Pero el honor de inaugurar un servicio regular de noticias pertenece a Holanda y Alemania, donde se editaban varios panfletos de noticias quincenales y semanales a principio del siglo XVII.
El crecimiento del periódico coincidió con la inauguración de la Revolución Industrial. El periódico surgió como una fuente indispensable de noticias rápidas y regulares en el momento en que el tren, el barco a vapor, la hélice, el casco de metal, el telégrafo óptico y después eléctrico estaban haciendo su aparición en un proceso que significó la aceleración de la historia.
Fuente: Raimond Williams, "Historia de la Comunicación". Vol.2. Editorial Bosch Comunicación, 1992.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aquellos comentarios que sean innjuriosos, que no utilicen un lenguaje apropiado como el uso de malas palabras e insultos, no serán publicados en el blog. Las afirmaciones deberán estar debidamente argumentadas.